domingo, 24 de noviembre de 2013

¿SOMOS MODELOS PARA NUESTROS CHICOS Y CHICAS?



En una de mis últimas tutorías me cuenta una madre: "mi hija, cuando llega a casa coge unas gafas y se sienta a escribir", dice que lo hace como su seño.
Estas palabras, me hicieron pensar. Ya en otras ocasiones me habían comentado que me imitaban, pero esta vez he reaccionado de forma distinta. Quizás porque piense que somos modelos para nuestros niños y niñas y que podemos hacer mucho ante ello.
¿Tendríamos que modificar algo? ¡Probablemente!.
Nuestra manera de comunicar, el volumen de voz, algunos modismos ocasionales, nuestros días no tan buenos....
No se trata de cambiar nuestra forma de ser y de expresarnos ante el mundo, pero quizás sí la podamos hacer más selectiva en vista de lo evidente.
No creía que mis acciones, gestos, palabras y manera de plantearme el día a día fueran tan importantes para esa niña, que antes de escribir en casa se ponía gafas, como la seño.
Es importante, leer en presencia de los niños y niñas y escribir, para que se conviertan en buenos lectores y escritores. Igualmente, pintar, pensar, debatir, y compartir con ellos y ellas historias nuestras.
Por ello, es nuestra responsabilidad cuidar el día a día con nuestro alumnado, para mejorar nosotros y para contribuir como modelos positivos y enriquecedores de su aprendizaje.
Lo que no queramos que hagan ellos y ellas no lo debemos hacer nosotros, y lo que queramos que prime en su manera de entender la vida, transmitamos de manera clara y contundente en nuestro quehacer diario. Es una responsabilidad que como docentes no podemos olvidar.

¡Buenas noches!.

domingo, 3 de noviembre de 2013

¿POR QUÉ TRABAJO POR PROYECTOS?

TIENE MUCHO ENCANTO!!! os cuento!

A la hora de empezar a trabajar con mi alumnado en un proyecto en concreto, en principio no tengo límites, dejo casi todo el proceso organizativo a la aventura. ¿Inseguridad? ninguna. Curiosidad: 100%.
Se propone un tema para trabajar, que sale por diversos motivos:
Inquietud del alumnado, ha salido en la Asamblea de clase, un proyecto compartido del Centro, etc. 
A partir de ese momento, comienzan a entrar en nuestras cabezas imágenes,mensajes, para lo cual se programa una sesión de "ideas previas". Los niños y niñas se atreven a crear sobre el tema, a hablar de otros relacionados, a nombrar a personajes que de alguna u otra forma tienen que ver.
Después se crea una actividad motivadora, que puede ser un audiovisual, una exposición, una salida, etc.
Y se encadenan tareas para ampliar y o modificar esas ideas previas.
Recursos digitales, aportaciones de la familia, pedir información en otras aulas.
Empiezan a aparecer materiales diversos, desde archivos digitales, imágenes, libros, audiovisuales, copias en un folio de información, todo ello obtenido en Biblitecas, Enciclopedias en casa, uso del ordenador, etc.
Igualmente y paralelamente, investigo también sobre el tema elegido, con lo cual yo también amplío mi formación. Aporto ideas, materiales diversos y recursos digitales.
Los días en los que tengo programado trabajar dicho proyecto, vamos avanzando presentando el material nuevo y elaborando trabajos en grupos, los cuales se van poniendo en común, y mostrando al resto de la comunidad educativa del Centro. 
Mi alumnado tiene un tema importante de qué discutir, aportar, dibujar, escribir, con el que se siente autor y a la vez comunicador de su aportación personal.
La familia, al igual que el alumnado, se impregna de información y o experiencias sobre el tema y se siente útil en la Escuela y en el aprendizaje de su hijo o hija.
El proyecto avanza y vamos realizando trabajos libres y o dirigidos por la información que vamos obteniendo, con lo cual, también se sienten ellos y ellas protagonistas.
Cuando hacen una salida con sus familias, van relacionando todo lo que obtienen de este proceso y amplían su motivación e información. 
Podemos ir completando a lo largo del trabajo un mapa conceptual, en el que el alumnado va decidiendo el itinerario que va desarrollando.
En definitiva, un proceso de aprendizaje hechos por y para ellos y ellas y útil para los demás, aprendizaje significativo, como diría David Ausubelhttp://es.wikipedia.org/wiki/Aprendizaje_significativo.
Al final de este gratificante y encantador trabajo, siempre el resultado es mucho mayor que el de cualquier expectativa. 
¡Ah!, y para mí es de especial importancia sus dibujos, sus creaciones. En ellas me apoyo para la evaluación del Proyecto, al igual que en sus opiniones sobre el desarrollo del mismo.
El que a mi alumnado y sus familias les guste o les haya motivado haber trabajado en dicho Proyecto me da mucha información para mi proceso evaluador.
Para mí es grato participar en estos proyectos, ya que es compartido y vivenciado, las emociones de todos y todas influyen en los resultados, quedando finalizado el proceso creativo,
formativo e informativo de manera muy positiva.

 

domingo, 20 de octubre de 2013

El valor de la Asamblea en el aula

Uno de los momentos más especiales en mi aula es la Asamblea. Os explico por qué.
Los niños y niñas iniciados ya en Infantil en este momento del día consiguen muchas cosas en el aula: el poder compartir con sus compañeros y compañeras y su maestra, sus experiencias, sus lecturas, sus amigos y amigas, su familia, sus gustos y aficiones, un sinfín de momentos que sería imposible compartirlos en otro espacio. Se sienten importantes y sobre todo escuchados. Todo ello en un ambiente de atención y expectación a la vez, con un clima de respeto y sobre todo un momento dirigido por ellos. Cada día, el encargado o encargada de la jornada es el responsable y moderador de la misma. Da la palabra a sus compañeros y compañeras y modera todo ese fluir de experiencias y vivencias compartidas. Contribuye todo ello a la mejora de la autoestima, al compromiso del trabajo bien llevado, y a crear un vínculo afectivo, donde todo lo que el niño o la niña quiere comunicar, tiene lugar.
Por supuesto, el respeto al turno de palabra, está presente, al igual que la expectación por cada participación.
También está permitido hacer una lectura de algún libro o recurso aportado por algún miembro de la clase, para simplemente compartirla o para general algún debate.
He notado, que niños y niñas que al principio no se atrevían a participar, lo hacen cuando se crea un clima adecuado en el aula. Es importante, temporalizar la asamblea, con el fin de no alargar demasiado este momento tan importante y tan esperado por ellos y por supuesto por mí, que cada día aprendo un poco más de ellos y de ellas. Tengo un truco, una alarma que anuncia la próxima tarea del día, ésto también es acordado por todos y todas.
Buenas noches.

De nuevo en este rincón de reflexiones, no del todo pedagógicas!!!

De nuevo escribiendo reflexiones que quiero compartir con alguien, con personas que todavía vibren con su trabajo, que aún se sonrojen cuando cambian de lugar de trabajo o cuando tienen su primera reunión con las famillias de sus nuevos alumnos.
Intentaré contar cosas que ocurren, sin ser extraordinarias y que siguen dejando huellas.
Un abrazo.

miércoles, 9 de marzo de 2011

Reflexiones de una maestra novata

 
Es posible que algo estemos haciendo mal, no lo tengo claro, pero tengo algunas pistas.
Yo como docente tengo trabajo, que hoy en día es un privilegio, tengo un alumnado al que dedico muchas más de cinco horas, y además me preocupa, tengo un Centro, el cual he elegido libremente, esto tampoco le ocurre a la mayoría, y tengo un potencial educativo al que tengo que dar rienda suelta, esa es mi función.
Entonces, ¿dónde está el problema?.
Intentaré seguir las pistas que tengo.
El problema radica en que se está perdiendo la libertad del docente, del maestro, de la maestra, esa libertad, como decían nuestros mayores, "libertad de cátedra". Se está perdiendo el sentido común, es verdad, en todos los ámbitos, pero yo opino solo del que procedo, y pienso que un maestro o maestra, formado y actualizado , preocupado por su entorno inmediato y por lo que ocurre en el mundo, debe tener más apertura y menos obstáculos.
Se suele decir, la aministración nos aburre cada día con más documentos que rellenar, con más peldaños que subir, con la burocracia, no tenemos tiempo de enseñar, con tanto papel nos tienen aburridos.
Todo ello es verdad, pero ¿acaso nosotros no somos burocracia?.
Si nos plantáramos y rescatáramos el poder perdido seríamos más felices, haríamos más felices a nuestros chicos y chicas, y obviamente, crecerían más y mejor.
Que ¿cómo hacerlo?, pues creyendo en lo que hacemos, demostrándole al mundo, a la burocracia, a los demás, que podemos tener una Escuela justa, divertida y en paz.
Y la paz no se arregla celebrando un día, ni el gusto por la lectura viene por arte de un proyecto, ni la igualdad se mejora con planes. No, estoy convencida, se mejora en el día a día.
En las relaciones con los demás, en el gusto por lo bello, en el respeto por todos, vengan del lugar que vengan. Y todo ello y mucho más conseguirían mejores planes de igualdad, de paz, más interés y gusto por el arte, la poesía, por aprender.
Hoy más que nunca siento que tenemos que cambiar el prototipo de Escuela por una más libre y democrática, más respetuosa con los demás, mas ejemplarizante, más justa, más natural.
Lo que importa es lo que se escribe, y lo que se escribe sirve para reafirmar lo que piensas, pero lo que vas a hacer la semana que viene, viene dado por lo que tú y tu alumnado viva esta semana. Y eso no se debe escribir.
Las programaciones no se pueden convertir en los antiguos programas renovados, tienen que ser vivas y además tienen que tener sentido.
Todo lo que se salga de ahí, no cabe en la Escuela que yo busco. Sí cabe, intercambios de opiniones, modificaciones de acuerdos firmados, tertulias pedagógicas, en las que todos sean portavoces de todo, menos coordinadores y más maestros.
En esta Escuela cabrían todas las experiencias de todos, y sobre todo estaría presente el compañerismo, el estar al servicio de los demás, primero de los niños y niñas y después de los que trabajan al lado tuyo.
Es lo que haría florecer una generación más sana, cultivada, respetuosa y competente.
Estas palabras salen de mi mente y de mi corazón en un día como el de hoy, agridulce, en el que he sentido y he querido expresarlas.
Un saludo.

lunes, 15 de noviembre de 2010

Reflexiones de mi viaje a las Médulas


Hola seguidores, quiero compartir con vosotr@s mi viaje a Ponferrada.
Todo curso de formación es una oportunidad para el cambio, pero si hablamos de un curso en Ponferrada, Las Médulas, es un regalo, una manera de formarse en la naturaleza, una manera diferente de concebir una cultura diferente.
En aquel paraje natural, tuve oportunidad de pasar de una dimensión pedagógica a otra más humana, más social, más comunicativa, pero a la vez interiorizar unos sentimientos que quizás se produjeron en la época románica.
Cuando veíamos esos montes con tantos tintes, tan escarpados, y tan cerca de lo que llamamos cielo, nos imaginábamos a esos ciudadanos romanos subiendo cubas de agua y retirando piedras del camino, para lograr un engranaje que permitiera subsistir a aquel pueblo que nos dejó ese Paisaje Natural llamado Las Médulas.
No eran ambiciosos, solo buscaban lo que necesitaban para sus necesidades cotidianas. Gran ejemplo para nosotros, que queremos más de lo que necesitamos, buscamos a pesar de tenerlo todo y aún así, querer más y más.
Pasé del asombro a la cotidianeidad, del grupo a la soledad, era como un romper con la rutina del mundanal ruido, a pensar en lo que fue, en lo que es y en lo que será.
El grupo con el que fui, todos docentes y expertos en distintas disciplinas, científicos, geólogos, botánicos, arqueólogos, formamos un engranaje que nos enriqueció y nos comunicó con aquel lugar y con aquellos modos de vida.
Por otra parte, el reencontrarte con campos de castaños, tan cercanos a nuestra tierra, pero allí, en aquel paisaje, también fue un estar lejos sin perder tus raíces.
Una herencia que también nos dejaron los romanos.
En definitiva, una conjunción de lagos, montes rotos por la actividad minera, arboledas, montones de piedras inservibles, galerías dedicadas a la bajada de agua, piedras y ese preciado mineral, el oro, que a través de los tiempos se convertiría en un privilegio de los más poderosos.
Actividad, que transformó un paisaje en otro diferente por la acción del hombre.
Es ahora Patrimonio Artístico de la Humanidad.
Y yo me encontraba allí, estudiando esta transformación para después llevarla al Aula, con la mayor nitidez posible, y sobre todo con el mayor de los entusiasmos.
Gracias a todos los que hicieron posible este viaje a la Historia y sobre todo a los que nos dieron esta oportunidad única para contarlo.

domingo, 1 de agosto de 2010

Un cambio en mi vida profesional

 
Todo cambio supone sorpresas e incertidumbres, pero también esperanza e ilusión. Este es mi caso, paso de un centro de Mairena del Alcor a otro de Alcalá de Guadaira en la Barriada La Venta la Liebre.
Nostalgia por lo que dejo, que no es poco, pero pasión por lo que ha de venir, que siento que va a significar para mí un paso en mi vida profesional con un giro de 360º.
Sí, quizás vaya con demasiada energía, pues tengo mucho que aportar, pero es que creo que esa energía la puedo convertir en ilusión, creatividad, compromiso, trabajo en equipo y contagiar a toda una comunidad educativa que para mí no es nueva, creo que ya pertenezco a ella.
Cuando hablo de nostalgia, no lo hago con tristeza, pero sí siento que podía haber realizado muchas más grandes y pequeñas cosas, si me las hubieran facilitado. Pero es verdad que hay que trabajar en equipo, y yo he querido buscar un equipo que vibre conmigo en esta aventura que es la formación de niños y niñas y del profesorado.
Gracias a los que dejo, todos y todas han marcado mi vida, tanto profesional como personalmente, para bien o para mal, pero de todo se aprende y todo ello lo llevo en mi mochila, deseando que se recargue de buenas intenciones y aprender de los errores.
Mucho cariño he recibido y por tanto lo he volcado en mis alumnos y alumnas, en sus familias y en mis compañer@s incondicionales.
Agradecimientos para todo el que ha creido en mí, no por lo que hago, sino por lo que soy. También para el que me ha abierto los ojos, aunque a veces no haya querido hacerlo, y sobre todo al que ha estado ahí en los días que he necesitado recargarme, para que mi trabajo no se haya debilitado.
Sobre todo a mis chicos y chicas especiales, que aún en los momentos no tan buenos, me sonreían y me esperaban con sus muestras de cariño, sus miradas y con sus palabras.
Ahora he de pensar en el futuro, no muy lejano e intentar dejar huellas que sean para formar y contribuir al desarrollo integral de mi nuevo alumnado, que parece como si ya los conociera.
En ellos y ellas voy a poner todo lo que está a mi alcance, que creo que ya con mi experiencia docente y mi formación no va a ser poca. Eso me ilusiona y es un reto para mí. Espero cumplirlo y que me marquen como lo han hecho los anteriores.
Un saludo para aquellos que siguen ahí, y para los nueva comunidad educativa, ponerme a disposición de ella.
Lola Cepeda